domingo, 15 de mayo de 2016

Freud. Observaciones en torno a rostros y hombres

Fotografía de Freud acompañado por su hija Mathilde y su biógrafo Ernst Jones que se encuentra en la National Portrait Gallery
 
Después de leer el manuscrito inédito de la entrada anterior, los lectores de Freud quedamos diciendo: "what?, exijo una explicación". Sin embargo, la excelente edición de las Cartas de viaje incluye a continuación del escrito, un breve comentario de Michael Molnar titulado: Sobre el manuscrito. Molnar arroja algunas luces que no dejan tan solo al esforzado lector en su intento por comprender un poco lo que quiso decir Freud.    
 
Primero, Freud se encontraba de vacaciones en Londres y por lo tanto, el escrito no tiene la consistencia y claridad de sus artículos conocidos. Fue un entusiasmo momentáneo luego de una caminata por Hyde Park y Kensington Garden. Por el camino se encontró con una galería de retratos que era una muestra de la National Portrait Gallery. Se trata de un museo que exhibe pinturas de personajes importantes para la historia de la civilización. Existe hasta el día de hoy y ahora incluye una fotografía donde el creador del psicoanálisis aparece con su hija Mathilde y Ernst Jones.  
 
Molnar compara el manuscrito con El Moisés de Miguel Angel, otro artículo (más oficial y conocido) escrito bajo circunstancias similares; un viaje de placer en una ciudad hermosa y estando solo. El escrito "Observaciones en torno a rostros y hombres" versa sobre la sublimación. La sublimación es "la capacidad de cambiar un fin originalmente sexual por otro, que ya no es sexual". La tesis es simple: ¿Cuál es el papel jugado por la sublimación en el carácter y profesión del personaje histórico?
 
Toda carrera profesional implica una renuncia a los deseos arcaicos de la niñez, es decir una sublimación. Sin embargo, hay profesiones como la creación literaria, que requieren de un cierto apego hacia aquellos deseos pulsionales primitivos. Hay reminiscencias que no fueron objeto de la sublimación y el poeta las plasma en sus versos. De la misma forma, la belleza femenina es resultado de las huellas de deseos infantiles. Freud dice que las mujeres importantes son "nada bellas en principio", por cuanto han debido renunciar a estos deseos pulsionales y sublimarlos para el desempeño fiel de su profesión.
 
El análisis de Michael Molnar al manuscrito de Freud me parece adecuado porque está en sintonía con el resto de la teoría psicoanalítica y hace un intento por ubicar estas Observaciones en el contexto en que se dieron. Molnar se esfuerza por saber qué estaba pensando el creador del psicoanálisis al escribir estas notas circunstanciales. No se apasiona con las notas de Freud y el resultado es excelente.-              

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