miércoles, 27 de febrero de 2013

Entrevista con Carl Jung (1959)


 

A la edad de 82 años, Carl Gustav Jung brindó una entrevista al Dr. Richard I. Evans del departamento de Psicología de la Universidad de Houston en 1959.

Es una conversación apasionante y con sentido del humor por parte del médico suizo. Evans lo hace transitar por su relación con Freud y por el análisis de los principales términos del psicoanálisis: el complejo de Edipo, las fases del desarrollo psicosexual y los sueños.

Cuando Jung es consultado por el concepto de “persona”, la entrevista entra en el terreno de la psicología profunda. Jung sostiene que el Edipo es un Arquetipo descubierto por Freud y que la sexualidad no siempre juega un papel hegemónico en la actividad psíquica.

Hacia el final de la entrevista, Jung hace una distinción extraordinaria de los tipos extrovertido intuitivo e introvertido intuitivo. De verdad, esta entrevista es una joya. A continuación reproduzco las dos primeras preguntas:        

 
Evans: …usted estuvo trabajando conjuntamente con el doctor Sigmund Freud. Para muchos sería de gran interés saber cómo oyó hablar de él y cómo llegó a implicarse en algunas de sus ideas de trabajo.

Jung: Bien, de hecho, fue en 1900, en diciembre. Poco después de publicado su libro sobre la interpretación de los sueños, mi superior, el profesor Dr. Bleuler, me pidió que hiciera una reseña acerca del libro. Estudié el libro con mucha atención y no entendí muchas de las cosas que decía. Me sonaba extraño. Pero tuve la impresión de que ese hombre realmente sabía de qué estaba hablando. Y pensé: “esto es sin duda una obra maestra, llena de futuro”. Por entonces, yo no tenía ideas propias, sólo era candidato para hacer carrera como ayudante en la clínica psiquiátrica. Y entonces empecé con psicología experimental o psicopatología. Apliqué el método de asociación experimental que Wood había aplicado en la clínica psiquiátrica de Kraepelin, en Münich y obtuve resultados. Esa reacción tras reacción a una serie de palabras, no tiene mayor interés. Lo interesante era porqué algunos no reaccionaban ante ciertas palabras o de una manera totalmente inadecuada. Y entonces empecé a estudiar esos momentos donde la atención o la capacidad, aparentemente, de esa persona empezaban a desaparecer. Y de pronto descubrí que la gente pensaba en asuntos íntimos y personales o que tenían en la mente aunque momentáneamente no pensaran en ellos, es decir, cuando no eran conscientes. Sin embargo, venía una inhibición del inconsciente que les hacía difícil expresarse. Y entonces, examinando todos esos casos, muy cuidadosamente, vi que se trataba de lo que Freud llamó “represiones”. Y también vi lo que quería decir con “simbolización”. Y entonces escribí un libro sobre la psicología de la dementia praecox, ahora llamada esquizofrenia, y le envié el libro a Freud y le hablé de mis experimentos de asociación y cómo confirmaban su teoría hasta el momento. Así es como empezó mi amistad con Freud.

Evans: Una de las ideas fundamentales de la teoría psicoanalítica original era la concepción freudiana de la líbido como una energía sexual psíquica.

Jung: Verá, al principio, yo tenía, naturalmente, ciertos prejuicios contra esa idea y después de un tiempo las superé. Pude hacerlo debido a mi formación biológica. Y no pude negar la importancia de los instintos sexuales. Pero más tarde me di cuenta de que estaba muy equivocado. Porque el hombre no está solo gobernado por el instinto sexual, hay otros instintos también; por ejemplo, en biología, el instinto nutricional es tan importante como el sexual. O en sociedades primitivas, la sexualidad tiene un papel menor que la comida. La comida es el deseo más grande. El sexo, lo pueden tener en cualquier momento, no son tímidos. Pero la comida es difícil de obtener. Y, por tanto, es el mayor interés. En otras sociedades, por ejemplo, el poder tribal es más importante que la sexualidad. Por ejemplo, hay muchos hombres de negocios que son impotentes, porque toda su energía va dirigida a hacer dinero, o a dictar leyes para todo el mundo. Les interesa más que las relaciones con las mujeres.

El “inferior” Adler, el más joven, el más débil, a él naturalmente, le interesa el poder. Él quería ser el hombre de éxito. Freud era el hombre de éxito, estaba arriba y sólo le interesaba el placer, el principio del placer. Mientras que Adler estaba interesado en el poder.   
***
 
 
Existe el registro fílmico de la entrevista completa. Haz click aquí


No hay comentarios:

Publicar un comentario